Teletrabajo y dolor de espalda

Teletrabajo y dolor de espalda

Después de las vacaciones, llega la vuelta a la rutina y por lo tanto, la vuelta al trabajo.

Desde la pandemia; la modalidad de tele-trabajo ha aumentado significativamente, siendo un gran avance, pero a la vez, ha traído graves consecuencias en la salud.

Según el INE (Instituto Nacional de Estadística) el 34,50% de la población trabajadora, ha tele-trabajado o tele-trabaja en la Comunidad de Madrid, siendo la ciudad española con mayor índice de teletrabajo.

¿Qué provoca esto?

Una vida sedentaria con menos descansos y más horas sentados, dolor muscular generalizado, fatiga visual e incluso dolor de cabeza.

Nuestro cuerpo no está preparado para estar largos periodos de tiempo en la misma posición, ya que el problema no son las malas posturas, sino estar en ellas constantemente.

¿Qué relación tiene el teletrabajo con el dolor de espalda?

La columna vertebral tiene la función de sostener y estabilizar el tronco manteniéndolo en posición erguida. Además, tiene distintas curvaturas, cuya función es distribuir las cargas, así como dar flexibilidad a todo el raquis.

Cuando estamos trabajando delante del ordenador, la postura típica por excelencia, es la de llevar los hombros hacia delante, lo que nos provoca un acortamiento del pectoral, cabeza adelantada, cayendo el peso de esta hacia delante y la musculatura del cervical tiene que soportar tal esfuerzo, causando dolor, así como la lumbar hacia atrás, invirtiendo su curvatura normal.

¿Qué puedo hacer para evitarlo?

Primero debemos ser conscientes de que no existe la postura perfecta para estar sentados; no hay evidencias de ello, de lo que sí hay evidencias es que no es beneficioso mantener esa posición durante horas. Nuestra columna es flexible y capaz de adquirir multitud de posiciones.

Las recomendaciones que os pueden ser más útiles, son las siguientes:

Tener una espalda fuerte y flexible:

Estar sentados es un esfuerzo a nivel muscular y como todo, hay que entrenarlo.

Es imprescindible llevar una vida activa, con ejercicios de fuerza, aeróbicos y de estiramiento.

Hacer pausas:

Con el teletrabajo, el descanso es menor que en la oficina y esto puede ser un factor perjudicial para la salud.

Debemos hacer descansos activos de 10 minutos cada hora, ayudándonos a mejorar la concentración, reducir el estrés y la tensión muscular.

Adaptar el lugar de trabajo:

Es importante que la pantalla del ordenador, esté a la altura de nuestros ojos, así como el escritorio a nivel de los codos.

Los pies tienen que estar apoyados en el suelo.